Paco Ureña y Emilio de Justo saludan ovación en el cierre de San Isidro
domingo 10 de junio del 2018 - Reseña
Última tarde de San Isidro con un “No hay billetes” y la presencia de SM el Rey Felipe VI en la tradicional Corrida de la Prensa ante toros de Victorino Martín.
El primero de la tarde pecó de falta de fuerza. Manuel Escribano puso banderillas y brindó al Rey. El astado levantaba la cara a medio muletazo sin emplearse y abrevió matando de una entera caída. A portagayola se fue a recibir al cuarto y aguantó estoicamente. Buen recibo a la verónica. Destacar el tercer par del sevillano al quiebro pegado a tablas. El inicio fue esperanzador viniéndose de lejos y cambiándoselo por la espalda pero fue un espejismo y no tuvo fuerza alguna.
Paco Ureña recibió el cariño de la afición que le obligó a saludar al romper el paseíllo. Su primer rival tuvo calidad y fue a más. Lo dosificó el murciano que ligó tres tandas por el derecho con el de Victorino humillando y desplazándose con clase con los olés rotundos de Madrid. Al natural también funcionaba y los últimos compases con el toro a menos fueron más deslucidos. Estocada entera pero tardó en doblar y saludó ovación. El quinto se desplazaba en los inicio y Ureña por abajo. Tras una una por el derecho con largura tratándolo con mucha suavidad, acortó el de Victorino recorrido y le complicó el lucimiento a Ureña
Emilio de Justo volvía a Las Ventas tras ocho años de ausencia. El tercero de la tarde tuvo calidad y su mayor virtud fue la humillación. A final de cada muletazo rebrincaba y le dificultó la limpieza de las tandas al extremeño. Sacó muletazos muy destacables ante una embestida con transmisión que exigía poder. El sexto fue reservón pero Emilio de Justo tiró de oficio para sacar momentos intensos con mucho mando. Esa actitud tuvo reconocimiento y saludó ovación tras entera.